En una de la bibliotecas públicas de aquí de St. Catharines tienen la hora de cuenta cuentos para los niños y hoy llevé a Diego para que se empieze a sumergir en el mar de historias y de la lectura. A Diego le gusta cuando le leo historias en casa y hoy durante esta lectura en público, no fué la excepción. Diego era el único niño y el más pequeño. Él estuvo muy tranquilo, miraba con atención a la chica que estaba leyendo y también a los otros niños a su alrededor. El tiempo se fué volando, la hora fué una combinación de lectura de cuentos, canciones y burbujas de jabón.
Cuando regresamos a la casa, Diego estaba super estimulado. Desde ayer empezó a poner a trabajar sus cuerdas vocales y sus pulmones y hoy se la pasó gritando. Me da mucha risa cuando grita pues son las primeras veces que lo hace y él se emociona mucho. Me pregunto que es lo que piensa, "interesante, ahora puedo hacer sonidos más agudos y más largos y mamá me voltea a ver cada que lo hago." Ya subiré después un video.