Yo tenía muchas cosas que hacer el día de hoy, así que fué para Diego un día de estar con papá. Se fueron a la biblioteca y después fueron a ver a Gabe jugar squash. Me encanta la relación que tienen Jay y Diego, sera cuestión de alimentarla a cada momento para que siempre exista confianza y una buena comunicación entre padre e hijo.
Esta fué la cara de Diego de cuando llegaron a casa. Claro, sin calcetines pues el niño se los quitó en el camino.
Terminaron el día con una sesión de risoterapia.