Hoy Diego
pisó por primera vez la Casa de los Azulejos en el centro histórico de la
ciudad de México. Nos encontramos ahí con Angy, una de mis mejores amigas y su
familia. Disfrutamos la tarde comiendo y platicando sobre nuestros retoños y
también planeando un pequeño viaje a algún lado en Querétaro. Aurora, su hija,
ya tiene 1 año 9 meses y es muy simpática y parlanchina. Angy y yo tenemos
muchas cosas en común y por eso valoro mucho su amistad. Ya aprenderá Diego a
edificar buenas y duraderas amistades cuando crezca.
De regreso
a casa disfrutamos una caminata por la recién renovada Alameda Central. Siempre
me encanta pasar a un lado del Palacio de Bellas Artes y admirar su
majestuosidad.
