Monday, March 24, 2014

Librería

Lo prometido es deuda. Hace una semana llevé a Diego a la librería y había estado jugando con el tren. Le había dicho que ibamos a regresar para que siguiera jugando, así que cumplí mi promesa el día de hoy. Esta vez además de jugar con el tren, jugó también con unos tractores y con el abaco.

Todo estuvo bien hasta que llegó el momento de irnos, pues hizo su berrinche; aunque ya después se le olvidó al minuto.

Mientras estabamos caminando por el centro comercial, Diego vió un puesto de playeras las cuales tenían dibujos de animales. En cuanto las vió se acercó a ellas y empezó a imitar los sonidos del caballo, del perro y del león. Fue muy chistoso verlo haciendo eso y ya no quería irse de ahí.