Esta mañana me dio mucho pesar despertar a Diego. Usualmente él se despierta mientras me arreglo y tengo tiempo suficiente para vestirlo y darle su leche. Hoy fue diferente, a pesar de que yo estaba haciendo ruido para que se fuera despertando, no funcionó. Entré a su cuarto, prendí la luz, saqué su ropa, le hablé, lo moví y nada que despertaba; hasta que le empecé a cantar las mañanitas se fué medio despertando. Hasta me dió tiempo de sacarle fotos dormido y ni con el flash despertó, él estaba en un sueño muy profundo.
Cuando lo recogí en la tarde de con Janis, me dijo que no había tomado su siesta esta tarde. Así que veremos como duerme esta noche.
Por lo pronto antes de dormir estuvo disfrutando la silla que su abue y sus tías en México le regalaron. Lo único es que ahora debemos tener cuidado pues ya sabe como subirse y también se pone de pie en ella.
