Diego y Jay visitaron a algunos amigos en Hamilton esta mañana, en su camino de regreso a casa hicieron una parada en Ikea, ¿Para que en Ikea? pues nada menos que para comprar más vías de tren para Diego, o ¿he de decir para Jay?. No sé realmente quien disfruta más jugando con los trenes. Al menos comparten el mismo gusto en este momento.
Cuando llegué a casa Diego me dijo que había comido un helado y papas a la francesa. Aunque uno quiera ocultar algo, este niño lo despepita todo.