Diego tuvo un buen día hoy, pero no las paredes y la alfombra de la sala de la casa de sus abuelos. Fuimos a su casa para cenar, estábamos en la sobremesa y Danae, Ethan y Diego estaban abajo en la sala. Danae y Ethan estaban entretenidos haciendo algunas manualidades y Diego por su lado también estaba entretenido rayando la pared y la alfombra con un marcador, que afortunadamente era a base de agua. La cara se me caía de la sopresa cuando vi lo que había hecho.
Hablamos con él, le dijimos que eso estaba mal y que no debería hacerlo nunca. Ya después les pidió una disculpa a sus abuelos. Afortunadamente se pudieron quitar las rayas y no quedo huella de su travesura.
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