Bendecida por tenerte en mi vida, Diego. Has sido un niño fácil de educar, hasta el día de hoy. Tu papá y yo queremos brindarte las herramientas que necesitarás en tu vida para ser feliz. Pero déjame decirte que la felicidad no se adquiere rodeándose de cosas materiales y de gente superflua. La felicidad la encuentras en ti mismo, viene de la paz que Dios pone en tu corazón y que puedes compartir con otros. Cuando tú estás satisfecho internamente es que has encontrado la felicidad. Siempre recuerda que valores como la honestidad, la responsabilidad, el respeto y el amor, son clave para que tu paz interior perdure. Nunca dudes en acercarte a nosotros cuando tengas un problema, además de tus padres somos tus amigos en quien puedes confiar. Solo tienes 3 años en este momento y aún no sabes ni leer, yo lo sé, pero crecerás, y tal vez vas a querer regresar a este blog y leer esta historia del día de hoy cuando tengas 20 años. Mi consejo seguirá siendo el mismo a cualquier edad que tengas. Te amo y siempre te amaré.
Tal vez recordarás después como me gustaba cantarte esta canción: "I will love you forever, I will like you for always, as long as I am living, my baby you will be".Te amo.
Abriendo su regalo, Thomas en un barco pirata.
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