Lo más difícil fue cuando me fui en la mañana y dejé a mis dos amores en casita. Pensé en mi niño, pero el trabajo me mantuvo ocupada. Pero gracias a la cercanía vine a la casa en mi hora de comida. Extrañé a Diego, pero él estuvo bien y ya en la tarde después de comer estuvo risa y risa. Fue una de sus tardes de estar de simple y me encantó. Sus risas alegran mi corazón.
No comments:
Post a Comment