Nunca está de más

Hay que aprovechar cada momento que se pueda para enseñarle algo a Diego. Jay se puso a leerle un cuento en la mañana poco después de haber tomado su leche. Aunque el rango de atención de Diego no es muy grande en esta edad, se le va formando el hábito de escuchar y de observar las imagenes en los libros.
Jay y yo platicabamos anoche sobre como Diego va a ser de grande. Le va a gustar devorarse los libros o va estar mas interesado en deportes, o en tecnologia, o en arte, ya veremos.

Fue una noche triste, el globo amarillo de Diego que le inflamos el 26 de Nov. para el día de su cumpleaños, llegó a su fin esta noche.
Los restos del globo en el brazo de Jay y Diego llorando su partida. Lo siento, Diego, hay cosas tristes en la vida, pero tenemos que aprender a sobrepasarlas.